EXISTIMOS PARA AYUDAR A HOMBRES Y MUJERES A ENCONTRAR LIBERTAD EN CRISTO A TRAVÉS DEL EVANGELIO.
Pero gracias a Dios que, aunque antes eran esclavos del pecado, ya se han sometido de corazón a la enseñanza que les fue transmitida. En efecto, habiendo sido liberados del pecado, ahora son ustedes esclavos de la justicia.
Romanos 6:17-18
Nuestra Historia
Setting Captives Free fue fundada en el año 2020 por Mike y Jody Cleveland; y fue revisada en el 2017 para comunicar más claramente el poder del evangelio para transformar corazones y vidas.
Nuestra Junta Directiva
Setting Captives Free es vigilada por una Junta Directiva y es un ministerio de Gospel Growth Ministries, una organización 501C3 (sin ánimo de lucro) fundada por Mike y Jody Cleveland.
Aunque profesaba la fe cristiana, viví en pecado por muchos años, hiriéndome a mí mismo y a otros. Entonces un día Dios abrió mis ojos para ver a Jesús en la cruz, liberándome de la paga del pecado y a la vez, con Su resurrección, liberándome del poder del pecado. Puse mi fe en ese mensaje, recibí el regalo del Espíritu Santo, y he estado aprendiendo desde entonces a andar en el Espíritu para así dejar de gratificar las lujurias de mi carne. Mi esposa (Jody) y yo fundamos Setting Captives Free para ayudar a otros a disfrutar de la misma libertad que nosotros encontramos.
Mike Cleveland
Por muchos años trabajé duro por agradar a Dios con mis propias obras. Pero a pesar de volverme más y más legalista en mi fe, mi atadura al pecado se hacía más fuerte. Entonces, en mi peor momento, Jesús finalmente llegó a mí. Sólo Él podía hacer, o mejor, había hecho lo que yo jamás podría hacer: vivir una vida perfecta, morir la muerte perfecta, y darme Su justicia como un regalo para mí, En Su gracia, Él ensambló a este hombre quebrantado, lo dejó nuevo, libre, con descanso, y enamorado del evangelio. "En Él (Cristo) tenemos la redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados, conforme a las riquezas de la gracia." (Efesios 1:7).
Rob Robertson
He sido cristiano por más de 50 años y, como un cristiano líder de estudios bíblicos, siendo llamado a ministrar como Capillán de la Armada y después pastor, tenía "pecados secretos" de los que no podía zafarme. Yo oraba, leía la Biblia, le hacía promesas a Dios, pero ninguna de estas cosas trajeron libertad de las ataduras que llevaba. Después de hacer varios cursos de Setting Captives Free en el 2013, vi por primera vez que el evangelio no era únicamente para mi salvación, sino para todos los aspectos de mi vida. Fue como encontrar la "llave maestra" que estuvo en mis narices todo el tiempo. A medida que el evangelio se convirtió en mi enfoque, entendí el poder de morir a mí mismo y de vivir en Cristo por fe. No fue por lo que hice, sino por lo que Jesús ya había hecho. Porque escrito está: "Con Cristo he sido crucificado[a], y ya no soy yo el que vive, sino que Cristo vive en mí; y la vida que ahora vivo en la carne, la vivo por fe en el Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí. (21) No hago nula la gracia de Dios, porque si la justicia viene por medio de la ley, entonces Cristo murió en vano" (Gálatas 2:20-21 LBLA). Cuando Jesús fue crucificado, yo fui crucificado. Cuando Jesús resucitó de entre los muertos, yo también lo hice. Ahora por fe ya no vivo por mis obras, sino por el poder del evangelio trabajando en mí y a través de mí (Romanos 1:16-17).
Bill y Diane Miller
El evangelio de Jesucristo salvó nuestro matrimonio de muchos pecados: impureza irrespeto, adulterio, bancarrota, ira, furia y muchos más. Cuando Dios reveló el evangelio del amor y del poder a nosotros por fe en la muerte y la resurrección de Jesús, nuestros pecados fueron perdonados y nuestras viejas vidas fueron dadas a muerte en la cruz con Jesús. Y cuando nos levantamos de la tumba con Cristo, se nos dio poder por medio del Espíritu Santo para vivir y amar de nuevo: "En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amó a nosotros y envió a su Hijo como propiciación por nuestros pecados" (1 Juan 4:10 LBLA).
Erick Hurt
En Qué Creemos
Nos aferramos al evangelio que ha sido predicado por más de 2000 años. Por sí mismo almacena el poder para la salvación y para vencer el pecado. Para más información, lee nuestra declaración de doctrina (Inglés).