¿Estás experimentando el dolor de la soledad hoy? ¿Te sientes olvidado por amigos, abandonado por los que se supone que te aman? Mira a Jesús y ve que murió en la cruz y experimentó una soledad total en tu lugar. Murió solo para poder unirte con Dios y enviar su Espíritu para que siempre esté contigo. Resucitó para darte una nueva vida de amor y alegría que es compartida con la gente a lo largo del tiempo y en todo el mundo.
¡No estás solo, sino que eres amado! Dios te ha puesto en su familia. A través de Su Hijo Jesús, Dios te ha calificado para compartir la herencia de los santos en la luz. Te ha liberado del dominio de las tinieblas y te ha transferido al reino de su amado Hijo, en el que tienes la redención, el perdón de los pecados (Colosenses 1:12-14).
Abraza tus sentimientos de soledad como una invitación de Jesús a acercarte a Él (Santiago 4:8), a experimentar su amor más profundamente (Romanos 5:1-8), a tener comunión con Él en sus sufrimientos (Filipenses 3:10). Ofrece a Jesús el dolor de tu soledad y recibe el consuelo de su Espíritu, porque al hacerlo, experimentarás una dulce intimidad con tu Señor que eclipsará todos tus sentimientos de soledad.
Pregunta: ¿Cómo es que mirar la muerte sacrificial de Jesús en la cruz y Su gloriosa resurrección alivia los sentimientos de soledad?
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Judy escribe, "Señor, cuando te miro, veo que todo lo que tu Hijo ha pasado por mí, Él ha sufrido tanta soledad al estar separado de ti y también de toda la humanidad al morir por todos. ¿Cómo podría pensar que me acerco a lo que Él sufrió por mí? Sin embargo, ayúdame a mirarlo a Él y a recordarlo cuando me sienta mal. Ayúdame a mirarte a Ti. Amén".
Austin escribe, "Jesús sabe realmente lo que es la soledad. Fue separado del Padre cuando fue colgado en la cruz. Eso me desgarra de adentro hacia afuera. Pero lo hizo con amor. Sabiendo que ir a la cruz para pagar la pena por nuestro pecado y tomar el castigo con toda la fuerza nos conectaría de nuevo con Dios. El último acto de amor y misericordia Juan 15:13"
Jen escribe, "Jesús soportó la máxima soledad en la cruz para que yo nunca experimentara ese tipo de soledad. Su sacrificio es el amor en acción, el cumplimiento de las promesas de que Dios nunca me dejará ni me abandonará. ¡¡¡¡Nunca estoy sola!!!!"
Mike L. escribe, "Imagina la unión que Jesús tuvo con Dios y el Espíritu Santo, ¿podrían tres seres estar más cerca que eso? No lo creo, pero Jesús dejó voluntariamente esa bendita unión para venir y liberarme, libre del pecado, la muerte, el sufrimiento y la soledad. Por la alegría puesta ante Él, Él soportó la cruz, Dios su Padre se alejó de Él, qué aplastante debe haber sido, no puedo ni imaginar lo que hubiera sido asumir los pecados del mundo entero por toda su existencia, y mucho menos sólo los míos, sin embargo Jesús voluntariamente hizo eso por mí. Ahora estaré con Él eternamente, así que cuando me sienta solo pensaré en esas cosas y soportaré el tiempo que tengo en esta tierra y esperaré la eternidad. Gracias, Señor Jesús, por ser mi mejor amigo, nunca dejándome ni abandonándome, sino enviando tu bendito Espíritu Santo para consolarme. ¡¡¡Qué hermoso Salvador tenemos!!!"