Erik escribe, "Liberando Cautivos ha cambiado mi vida por completo. Empecé el Campo de Entrenamiento en Pureza porque mi impureza sexual había llegado a ser un baluarte en mi vida a tal punto que se me perdió mi ser.
Por mi vida entera, he estado muy involucrado en mi iglesia, pero también luchaba con la pornografía y la impureza sexual. Por mi soberbia y ensimismamiento, decidí guardar en silencio mis luchas contra el pecado, pensando que batallaría y vencería mi carne en mi propio poder, pero, claro, sólo fallé repetidamente. Llegó al punto donde todos mis pecados que había escondido por tantos años fueron expuestos ante todos a quienes amaba; el resultado fue devastador.
Empecé este curso para remendar las relaciones con mi esposa, mi familia, y mis amigos, y para que verdaderamente caminara con Cristo y tuviera una relación apasionada con Él en que no le escondo nada. Anhelaba por tanto tiempo entregar mi vida entera a Cristo, pero mi lujuria me lo prohibía.
Este curso ha sido la herramienta que me faltaba para cambiar todo. Ahora, me lavo diariamente en la cruz, y camino en el Espíritu. Mi vista entera de la vida ha cambiado porque Dios me ha dado un corazón nuevo. Tengo un plan de batalla muy específico para batallar contra la carne porque nunca quiero volver a donde estuve. He visto a Dios moverse en mi vida tanto durante los últimos 30 días, y estoy muy animado para continuar a aplicar estas verdades fundamentales a mi vida cada día. Se me quitó el velo de los ojos, y Dios claramente me reveló que Jesucristo en la cruz no sólo me quitó el pecado, sino también la culpa y la vergüenza en que el pecado me encarceló.
Soy una nueva creación que espera con ganas todas las bendiciones que Dios tiene para mí, sin mirar hacia atrás y cómo he dejado que el diablo manipulara mi vida. Dios es tan bueno, y honestamente puedo decir que fui cautivo en la esclavitud de la pornografía y la impureza sexual, ¡pero Él me liberó! Su palabra y este curso han sido centrales en mi caminata con Él en los últimos 30 días, y estoy eternamente agradecido. A Dios sea la gloria; ¡merece toda la alabanza!
Recomiendo encarecidamente este curso porque te entrena a darse cuenta que por sí mismo, nunca vencerás el pecado; pero por el poder de la cruz, ¡Dios ya ha proveído la victoria! Este curso continuamente estudia la Escritura, explicando claramente el plan de Dios para nosotros y cómo podemos ser libres. Si quieres que tu vida sea cambiada para siempre, no busques en ningún otro lugar sino en Liberando Cautivos."