¡Saludos y bienvenido(a)!
En la lección de hoy, vamos a irnos de vuelta hasta el Jardín del Edén, cuando Dios le dio a Adán la tarea de ponerles nombres a los animales. Adán vio las criaturas como macho y hembra, cada una con su par, y esto le mostró a Adán su propia necesidad: “Sin embargo, no se encontró entre ellos la ayuda adecuada para el hombre” (Génesis 2:20 NVI).
Ahora que Dios le había mostrado a Adán su necesidad, Dios tuvo una idea única al crear a Eva, ¿recuerdas? Dios puso a Adán en un sueño profundo y abrió su costado para que Adán pudiera tener su esposa.
Como en todas las cosas, Dios tuvo fue intencional al crear a Eva de esta manera. Él lo hizo porque el primer Adán es una imagen del último Adán, Jesucristo (1 Corintios 15:45). Jesús recibió Su esposa de una forma muy similar: Dios Le puso en un sueño muy profundo, el sueño de la muerte, El costado de Jesús fue abierto por un soldado romano y de allí salió la sangre para el perdón de los pecados y el agua que limpia, logrando ambas que los creyentes nos volvamos la esposa de Cristo. Y entonces vemos cómo ese Adán, en muchas maneras, fue “figura de aquel que había de venir” (Romanos 5:14).
Efesios 5:31-32 (NVI) Por eso el hombre dejará a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán un solo ser. (32) Grande es este misterio; pero yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia.
Pregunta 1. Cuando Pablo escribe en Efesios 5:31-32 acerca del hombre y su esposa unidos en una sola carne, ¿a quién se estaba refiriendo?
Oh, qué agradecidos deberíamos estar porque Jesucristo, el postrer Adán, fue puesto en una cruz y murió; y al hacerlo, ¡Él ha traído a Sí mismo Su esposa, para que podamos vivir en intimidad con Él por toda la eternidad! ¡Jesús murió para conseguir Su esposa!
Hoy, hablaremos acerca de la provisión que Dios ha hecho para los fuertes deseos de intimidad, y veremos que esto ha sido ilustrado para nosotros cuando Adán necesitó a su esposa y cuando Jesús murió por la Suya.
1 Corintios 7:1-2 (NVI) En cuanto a los temas de que ustedes me escribieron, lo mejor para hombres y mujeres sería no tener relaciones sexuales, (2) pero por causa de la inmoralidad sexual, cada hombre debe tener su propia esposa y cada mujer su propio esposo.